Dos disparos en la tarde.
Un caballo rueda herido,
y un hombre, con el caballo,
rueda herido.
Se ha cerrado una ventana.
La sangre baña el bañado,
abriendo cauce hacia el río.
Por los pastos de la noche,
llega al río.
La casa está a oscuras. Dentro
sólo la habitan ruidos.
Venir de las comadrejas.
Ir de las ratas. Ruidos.
Ir y venir de ruidos.
No se duerme. Todo a oscuras.
El quinqué, roto. Las velas,
un seco llanto amarillo.
Afuera, un barco. Y la sangre,
lenta, bajando hacia el río.
Por los pastos de la noche
siempre el río.
RAFAEL ALBERTI
Basladas y canciones del PARANÁ
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